Dicen que los elefantes tienen buena memoria y más cuando le deben la vida a alguien.
Yatta, una elefante de 18 años que ha vivido una experiencia traumática e injusta, cuando tenía a penas un mes de vida, a su mamá le arrebataron la vida frente a sus ojos, sólo por robar sus colmillos y venderlos en el mercado negro a un alto precio.
No obstante, la elefante tuvo mucha suerte, pues sus gritos de temor y tristeza, llegaron a oídos de los rescatistas de la organización Sheldrick Wildlife Trust (SWT) en Kenia, los cuales se encontraban patrullando cerca, actividad que hacen diariamente para proteger a los animales silvestres.
Aunque ellos lamentablemente no alcanzaron a salvar a la mamá de Yatta, si la salvaron a ella, por lo que rápidamente la acogieron entre sus brazos y la llevaron a su santuario natural, lugar que quedaba a unos pocos kilómetros.
A partir de ese momento Yatta vivió durante 10 años, bajo el cuidado, protección y amor de estos héroes, pues cuando cumplió dicha edad, sus cuidadores decidieron que era hora de que viviera su vida natural, por lo que la liberaron en su hábitat junto a otros elefantes, eso si, en un lugar muy cercano a ellos, querían tenerlos cerca y protegerlos en sus jornadas de patrullaje.
Yatta se convirtió en mamá.
Recientemente, Yatta teniendo 18 años de vida, tuvo a su primer bebé, un macho muy sano, alegre, juguetón y muy inteligente, pues no le gusta separarse de su madre, se mantiene siempre entre sus patitas.
La madre, muy orgullosa de haber dado a luz a tan precioso macho, decidió que quería presentárselos a sus antiguos cuidados, aquellos que fueron como sus padres, pues no sólo le salvaron la vida, sino también se adueñaron de su corazón, ella aunque ya tenía una vida independiente, nunca se olvidó de aquellos seres que fueron sus héroes, que le permitieron ser mamá y tener la vida que hoy tiene.
Yatta, después de recorrer unos pocos kilómetros en compañía de su bebé, llegó al santuario en el que había vivido la mayoría de su tiempo, en cuanto vio a sus cuidadores, no podía contener la alegría, agitaba fuertemente su trompa y orejas mientras veía como sus papás se acercaban a ella y a su hijito.
Ella es una mamá orgullosa. Y en una muestra de absoluta confianza y afecto, ella trajo a su bebé para que conociera a la gente que la salvó. – Expresaron los cuidadores a The Dodo.
El bebé, al cual los cuidadores llamaron Yoyo, por su parte, se mostraba un poco más tímido, no obstante, también parecía entender que era un momento de alegría, pues también movía su trompa y sus orejitas en símbolo de entusiasmo y amistad.
Mira a continuación un vídeo del adorable bebé elefante.
Los cuidadores se sienten muy orgullos de la labor realizada, pues no sólo lograron que Yatta saliera adelante, sino que saben que son dueños de su amor y agradecimiento, se sienten sin duda alguna, parte de la familia.
No solo hemos salvado a un bebé huérfano y la hemos criado, sino que ha regresado exitosamente a la naturaleza y comenzó su propia familia. Para los elefantes, la familia lo es todo, así que no es de sorprender que elijan compartir su nuevo miembro de la familia con sus antiguos cuidadores humanos, ya que son parte de su familia. Imagínese nuestro deleite cuando eligió compartir su segundo nacimiento con nosotros, volviendo a su antigua casa y familia humana, para que pudiéramos ser parte de la celebración de la llegada de su nuevo bebé, un macho sano– Comentó Rob Brandford, de SWT a The Dodo.
La celebración a penas comenzaba.
Después de que todos los cuidadores conocieron al nuevo integrante de la familia, lo consientan y felicitarán a la mamá, decidieron acompañar a Yatta y Yoyo al lugar donde vivían, no obstante, su felicidad se duplico en cuanto se dieron cuenta que Yatta no era la primera mamá en su manada, pues cuando llegaron al lugar, observaron que dos de las elefantes que se criaron con Yatta, también habían dado a luz.
Este acontecimiento elevaba el número de elefantes nacidos en la naturaleza a 28, un logro sin duda alguna para la organización, pues ellos durante los años que llevan trabajando, han rescatado y liberado a un poco más de 100 elefantes en la selva, lo que significa que la población se recupera y vuelve a crecer y desarrollarse como especie, pues durante años, los elefantes han sido victimas de los cazadores furtivos.
Estamos encantados de ver cómo las manadas huérfanas comienzan a expandirse de manera tan natural. No podría haber un mayor regalo para nosotros, o un testimonio del éxito de Sheldrick Wildlife Trus, que compartir la alegría de estos elefantes bebés tan sanos como nuestros tres ‘niños de octubre’. – Finalizaron los cuidadores a The Dodo.
Mira a continuación un encantador vídeo de los tres bebés elefantes que llegaron al mundo para darle un poco más de esperanza a los elefantes en Kenia, en el vídeo también puedes observar a sus orgullosas madres.
Si quieres apoyar el bonito y significante trabajo que hace Sheldrick Wildlife Trus, puedes ayudarlos con una donación contactandolos en su sitio web Sheldrick Wildlife Trus o en su Facebook Sheldrick Wildlife Trus.
Fuente: The Dodo.