Este buen hombre no soportó ver la angustia de ese pobre animalito, e hizo lo que tenía que hacer.
Desde las horas de la mañana en las aguas de Burleigh Heads en las playas de Costa de Oro en Australia, fue vista lo que parecía ser una cría de ballena jorobada atrapada en una red de control de tiburones, sin embargo, ante las insistentes llamadas al Department of Agriculture and Fisheries al cabo de dos horas nadie llegó a rescatarla, por lo que un hombre actuó según le indicó su corazón.
Una vida, una oportunidad, una corazonada.
El hombre el cual pidió no ser identificado, estaba cansado de esperar habían pasado alrededor de dos horas desde que habían hecho las llamadas, la impaciencia de saber que una cría de ballena estaba pasándola muy mal se apoderó de su cuerpo y de su mente. Animado por unas personas que se encontraban en la playa, decidió subirse a su pequeño bote acompañado de sus aletas de natación, un instrumento para cortar la red y navegar hacia ella para rescatarla.
Vi a la ballena y pensé: ‘Eso está muy bien. Entonces vi que estaba en la red y pensé, ‘Eso no está bien – Contó el hombre, a The Guardian.
Cuando llegó al lugar ubicado mar a dentro a unos cuantos kilómetros de la playa, vio como la malla estaba enredada en la aleta pectoral de la pequeña cría, por lo que el hombre con sus propias manos logró soltarla y dejar que nadara libremente por el mar en busca de su madre.
Tenía entre ocho y nueve metros de profundidad. Debido a la adrenalina, mi corazón simplemente bombeaba – Dijo el hombre, a The Guardian.
En realidad fueron muchas emociones juntas, tener una ballena tan cerca y haber podido salvarla, por lo que el hombre regresó a la playa con el corazón lleno de alegría mientras los espectadores le aplaudían por tan bello acto.
Una alegría empañada por la profundidad de las leyes.
El Department of Agriculture and Fisheries, llegó a las 9:45 de la mañana, pero ya era demasiado tarde el hombre estaba regresando de haber salvado la cría de ballena, al no haber recibido una respuesta contundente de la organización. Caminando de vuelta en la orilla fue interrogado por los agentes de la institución, quienes le informaron que había violado una ley que prohíbe interferir con las redes de control de tiburones y que posiblemente, tendría que pagar una multa de 26.900 dólares australianos, es decir, 17.705 dólares estadounidenses.
Es un equipo peligroso. Desafortunadamente, hemos visto la pérdida de vidas cuando las personas se han enredado en este equipo. Dependerá del departamento considerar si este caballero será procesado – Aseguró Mark Furner, el ministro de pesca de Queensland Fisheries.
Aunque para las personas que observaron el increíble rescate el hombre no deja de ser un héroe, para las autoridades el acto fue considerado sumamente peligroso, además ¨servirá de ejemplo¨ para que a futuro otras personas no se arriesguen a hacerlo. Por suerte hasta el momento no han impuesto la sanción y esperamos que no lo hagan, pues si el hombre no hubiese salvado la cría de ballena, esta quizás hubiera perdido la vida y sería una gran pérdida para la humanidad por la belleza que representa.
Redes de control de tiburones.
En la costa de Queensland, fueron puestas kilómetros de mallas y tambores con la intención de minimizar los ataques de los tiburones, los cuales han atacado en varias ocasiones a los turistas, dejando un desolador panorama con uno de ellos. Pese a que las organizaciones animalistas se han opuesto a esta práctica, las redes siguen allí atrapando toda clase de animales marinos.
De igual manera han hecho llegar a el Department of Agriculture and Fisheries, muchas propuestas para eliminar el uso de las redes, argumentando que quitarle la vida a los tiburones no ha disminuido los ataques y que por el contrario causan daño a las ballenas que van de paso.
Su eliminación durante la temporada de migración de ballenas sería un buen comienzo y podría ir acompañada de la prueba seria de otras tecnologías como los drones – Explicó Jonathan Clark, activista de Sea Shepherd.
Esperamos que esta situación se solucione de la mejor manera, respetando siempre los derechos de los animales y salvaguardando la seguridad de las personas.