Tras años de lucha La Plaza Belmonte de Quito ahora será un escenario de verdadera cultura y sano esparcimiento.
El nuevo gobierno de Quito, Ecuador, decidió tomar la decisión de no renovar el contrato de arrendamiento de la Plaza Belmonte a la empresa Ganadería Triana, los cuales durante décadas se dedicó a utilizar sus instalaciones para presentar un show cruel e injusto con los animales, por lo que ellos tomaron la determinación al asegurar que es no es un espectáculo cultural.
El 5 de agosto del 2019, se vence el plazo con la Ganadería Triana, por lo que ellos podrán presentar sus espectáculos sólo hasta esa fecha, pues ese día comenzarán a remodelar la plaza de toros que se convertirá en espacios que ofrezcan eventos culturales y deportivos.
COMUNICADO OFICIAL | Sobre el contrato de arrendamiento de la Plaza Belmonte. pic.twitter.com/rmDRoVRTe0
— EPMQT (@EPMQuitoTurismo) April 30, 2019
El actual alcalde de Quito, creó en su plan de gobierno programas de política pública que manejen de forma responsable y respetuosa a todos los animales.
Durante mi administración todos los planes, programas y proyectos deberán enmarcarse en el respeto de los derechos de la naturaleza y el bienestar animal. – Expresó Jorge Yunda, alcalde de Quito a Zoorprendente.
El gobierno de la capital del país afirma que la tauromaquia solamente genera un profundo sufrimiento y tristeza para los toros.
Los activistas animalistas están felices con la nueva decisión, pues creen que esta rompe la visión sobrevalorada que se tiene con respecto a las corridas de toros, creyendo que es una expresión artística y cultural.
Para empezar que a dicho espectáculo no deberían asistir personas, ni tampoco deberían haber individuos que se dediquen a quitarle la vida con pasión a un animal indefenso que no le está haciendo daño a nadie y que si depronto reaccionada de forma agresiva en algún momento, lo hace únicamente por miedo.
Tampoco la “profesión” debería ser remunerada, pero ahora que existe y que durante años ha sido una tradición, nuestro deber es enfrentarla y acabarla, para así poder liberar a los toros y fomentar el respeto a la vida.
Lo anterior fue exactamente lo que hizo Quito, por eso lo felicitamos e invitamos a que el resto de los países que están leyendo esta noticia, se unan al movimiento para al fin borrar de nuestra historia tantos animales que han sacrificado su vida por un espectáculo innecesario, banal y cruel.
Fuente: Zoorprendente.