Como siempre aquí está nuestro reconocimiento a esas empresas que le tienden la mano a los callejeritos, muchas gracias Oxxo!
Era un día caluroso al norte de México, la temperatura sobrepasaba los 40 grados celsius, era medio día, por lo que el calor se estrellaba más abruptamente sobre la ciudad y los seres vivos que habitan en ella, todas las personas se escondían bajo los techos de sus casas con el fin de huir del terrible calor.
Todas tenían ropa ligera, tomaban refrescos y descansaban, todos tenían opciones para hacer del calor una situación llevadera, no obstante, hay seres que no tienen nada y que están completamente desprotegidos y vulnerables a los cambios climáticos, y esos son los callejeritos.
Aquellos animalitos que por más de que sean pura nobleza e inocencia, están sometidos al calor, al frío, al hambre, a la sed, al miedo, a la soledad, no importa lo que este pasando a su alrededor, ellos no tienen nunca como defenderse o refugiarse, siempre tienen que enfrentarse a lo que sucede en el mundo, sin importar que tan malo sea.
Oxxo, una tienda amplia en productos pero también amplia de corazón.
Este era el caso de un cachorro que aparentemente había sido abandonado, tenía mucha sed y desespero por el calor que sofocaba su pequeño y peludo cuerpito, sin muchas opciones pero con un detector de personas de buen corazón, se aceró a una tienda Oxxo en busca de ayuda.
El perrito sabiendo que no podía entrar a la tienda, se acercó a la puerta y con miradita tierna y necesitada, le pidió a los empleados un poco de compasión, la cual se podía reflejar con una tacita de agua fresca y un platico de croquetas, pues no sólo el calor era sofocante, el no haber comido en días, también lo era.
Los empleados del lugar con el corazón lleno de voluntad y amor, le brindaron agua fresca y comida, productos que ellos mismos compraron en la tienda, no tomaron nada para el perrito que no hubiese sido pago.
Posteriormente a que el cachorro se alimentó e hidrato un poco, empezó a golpear las puertas del Oxxo, pues claramente quería entrar y hacerse amigo de tan fabulosas personas, los empleados conmovidos por tanta ternura e inteligencia, decidieron que adentro de la tienda era un mejor lugar para el animalito, por lo que le dieron la bienvenida dejándolo entrar.
Adolfo Pazzi Ahumada, había llegado recientemente a la tienda en busca de un poco de leche, en cuanto llegó y pudo observar como un adorable perrito descansaba felizmente en el frío piso de la tienda mientras recibía la brisa de los ventiladores, decidió preguntarle a los empleados quién era y por qué se encontraba allí.
A lo que el personal les respondió:
Ha estado aquí los últimos días. Sospechamos que su dueño lo abandonó. Vino a pedirnos ayuda. Solo podíamos proporcionarle comida, agua y algunos juguetes de la tienda que pagamos con nuestro dinero. Lo dejamos entrar porque la temperatura exterior es realmente infernal. Nos sentimos mal por él, pero se ve más feliz en la tienda. – Fueron las palabras de los empleados según Adolfo, el cual se las transmitió al medio de comunicación The Dodo.
Adolfo se quedó unos minutos en el Oxxo consintiendo al afortunado perrito, tiempo en el que pudo darse cuenta que se trataba de un ser adorable, amoroso y muy agradecido.
Si bien el hombre no podía adoptarlo, quiso tener un acto de amor con el perrito y de gratitud con las personas que había mostrado interés y cariño hacia él, por lo que le compró leche y algunas golosinas para que los empleados se las dieran durante el tiempo que él se quedará allí.
Me sentí mal por lo que ha pasado el perro. Pero ahora está recibiendo el amor que se merece. – Comentó a The Dodo Adolfo
De igual forma los empleados le dijeron a Adolfo que no se preocupara, pues ellos tienen el compromiso de cuidarlo hasta que algún comprador se enamorará de él y decida darle un hogar para siempre.
Con información de: The Dodo.