Separarlos significaría una desconexión del mundo para ella.

En Luisiana, Estados Unidos, una familia entera de pequeños cachorritos incluyendo a su madre, fueron dejados en una zona rural sin alimento y a la deriva. Los ochos pequeños peluditos terrier y su mamita estaban en gran peligro hasta que una pareja bondadosa de humanos los halló y los cuidó en sus momentos más cruciales hasta que dejaron de beber leche materna y estuvieron listos para ir a un lugar adecuado.

Después de sobrevivir los primeros días, tan importantes para su desarrollo, los cahorritos junto con su mamá viajaron más de 2.000 kilómetros al lejano San Diego, California, para ser recibidos por Helen Woodward Animal Center, un refugio donde ofrecieron generosamente su ayuda para encontrar las familias adecuadas para cada uno de los perritos.

Estos hermosos bebés llamaron rápidamente la atención de quienes buscaban adoptar a un peludito, tan solo un par de días después de llegar al refugio, la mamá y seis de sus cachorros fueron adoptados por distintos hogares que seguramente los cuidarán muy bien. Sin embargo, hay dos excepciones preciosas que aún buscan un hogar.

Compañeros fieles.

Star y Denver son los últimos de la camada en el refugio, la razón va más allá de cualquier complicación de salud que puedan tener. Encontrar familia para estos dos pequeños ha sido una experiencia caótica porque deben ser adoptados juntos, ellos vienen en combo. Aunque a simple vista todo parece normal y estos hermanitos de tres meses se divierten mientras juegan y corren, la realidad es que Denver es el protector de su hermanita y la cuida con todas sus fuerzas debido a la sordera y ceguera de la peludita que a simple vista no lo demuestra.

Cuando Star parece perdida, Denver corre hacia ella y se comunica con ella. Les gusta jugar entre ellos, jugar a la caída, jugar con juguetes de cuerda y masticar juguetes de peluche. –Dijo Jackie Kelleher, gerente de redes sociales del refugio a The Dodo.

Star parece no tener ningún problema con sus limitaciones físicas, es independiente y totalmente activa, siempre y cuando, con su olfato, sienta presente a su hermanito, esa es la única condición que ella parece tener para vivir la vida plenamente.

Los voluntarios en el refugio la cuidan mucho pero también aseguran que mientras ella esté cerca a su hermano podrá vivir sin complicaciones, él la empuja hacia nuevas aventuras y aunque ella tarda un momento en acostumbrarse a los nuevos espacios, examina todo el lugar con sus pequeñas y sigilosas patitas, es un alma dulce y juguetona.

Un hogar que llegue pronto.

El refugio está empeñado en encontrarles un buen lugar para que pasen el resto de su vida. Junto con sus especificaciones de adopción hacen especial énfasis en un hogar local, es decir, cercano a la ciudad de San Diego o en el estado de California, además, una familia que pueda darles el amor, el cariño y la atención que necesitan. 

Cuando se muda a una nueva ubicación, se mueve muy lentamente poniendo una pata con precaución frente a la otra y ‘mapea’ el área a su alrededor. Denver siempre estará atento a sus necesidades, incluso cuando estén cerca de humanos. -Comentó Jackie a The Dodo.

Por ahora, estos dos hermosos hermanitos siguen esperando la oportunidad adecuada para seguir haciendo travesuras en un nuevo hogar, si quieres ayudarlos o adoptarlos puedes ir al siguiente enlace. Por ahora ellos esperarán con mucha alegría la llegada de una nueva vida.

Fuentes: Helen Woodward Animal Center, The Dodo.