Uno de los paramédicos conmovido por la escena, les consintió la cabecita para tratarlos de calmar.
A 440 kilómetros de Lima, la capital de Perú, se encuentra Chimbote, una ciudad portuaria en el norte del país. Fue en ese territorio donde las fiestas de fin de año de 2016 fueron testigos de un hecho tan triste y preocupante como esperanzador para todos aquellos que creemos en el amor incondicional de los peluditos.
Dos perritos en una carrera contra el tiempo por intentar salvar la vida de su papá.
Después de una noche de mucho alcohol y celebración, el hombre a cargo de dos peluditos adoptados tuvo un accidente en el que, debido a su estado de ebriedad, cayó en la calle dándose un fuerte golpe en la cabeza que lo dejó inconsciente. Aunque en ese momento él no se daba cuenta de lo que pasaba a su alrededor, sus dos amados perritos se quedaron a su lado y lanzaron ladridos para avisar a sus vecinos y conseguir ayuda.
Posteriormente, los pequeños estuvieron un breve momento con la angustia de no saber qué iba a pasar con ese hombre que les había dado la oportunidad de tener un hogar, los perritos lograron alertar a algunos guardias de las calles cercanas y a vecinos que pudieron comunicarse con Seguridad Ciudadana Chimbote, la agencia de guardia civil que atiende este tipo de casos y que, de inmediato, llegaron con una ambulancia para llevarlo al hospital principal de la ciudad.
Aunque toda la comunidad había visto la preocupación de los peluditos, en ese momento los paramédicos también pudieron sentirla, debido a un increíble comportamiento que enterneció a todos: los perritos se subieron a la ambulancia para acompañar al hombre y, mientras era estabilizado y estaba un poco desorientado, ellos lamían la cabeza a su padre, esperando que eso lo ayudara.
Ni un solo momento lejos de él.
Un tierno video mostró la incondicionalidad de los peludos desde que salieron del lugar del accidente hasta que el hombre entró a urgencias.
Mientras iban camino al hospital, los perritos no dejaron de mirar y besar al hombre que no entendía qué estaba pasando. Cuando fue momento de bajar del vehículo y dirigirse al centro de salud, siguieron con devoción la camilla de su papá y, aunque demoraban el proceso, los médicos trataban de tranquilizarlos.
Aquí puedes ver el tierno video de ambos perritos preocupados por su padre:
Esta historia de fidelidad no tiene un final confirmado, sin embargo, por la gravedad de las lesiones del hombre, podríamos pensar que fue dado de alta un par de días después.
Estos perritos, sin duda alguna, pasaron el fin de año tranquilos por haber recuperado a su papá de esos angustiosos momentos. Ellos nos enseñan que el amor no tiene límites cuando es verdadero.
Fuentes: Seguridad Ciudadana Chimbote, EFE.