Vaquita logró huir de un matadero y en el bosque encontró a unos venados que la ayudaron


La vaquita se asustó muchísimo al ver lo que hacían en la planta de beneficio animal.

Un matadero es el lugar más horrible que alguien pueda imaginar, es el infierno que dibujamos los humanos, pero real, real para millones de seres que allí nacen, crecen, sufren y encuentran la muerte de maneras muy crueles. Pero no sólo eso, también deben ver sufrir y morir a sus familiares y otros animales con los que generan fuertes vínculos.

Becky Bartels/Farm Sanctuary

De un lugar así en New York escapó una vaquita de poco más de cuatro meses de edad, ella muy asustada al ver que habían reunido a su madre y otras vacas que siempre habían estado a su lado y que luego de cruzar una puerta comenzaban a gritar horriblemente, empezó a correr desesperada por todos lados armando un gran alboroto y logrando huir como resultado de este.

Como era pequeña logró escabullirse y finalmente perderse al interior de un bosque cercano.

Becky Bartels/Farm Sanctuary

La noticia de su escape se supo por la zona y los dueños del animalito reclamaban que si alguien la veía, la regresara pues era de su propiedad. Varias semanas pasaron hasta que un vecino la vio de lejos, le costaba creer lo que veía: la vaquita había encontrado un lugar entre un grupo de venados, que la habían aceptado y la protegían como a uno más de ellos.

Becky Bartels/Farm Sanctuary

El buen hombre se preocupó de que algo malo le sucediera y poco a poco se fue ganando la confianza de la vaquita para sacarla del bosque, pues aunque tenía una nueva familia, allí no era un lugar seguro para ella.

Becky Bartels/Farm Sanctuary

También se puso en contacto con una fundación de protección animal que envió varios de sus miembros para que ayudaran al hombre a capturarla. Realmente, gracias a que la vaquita ya confiaba en el hombre, el rescate no fue particularmente difícil. La cercaron, la subieron a un camión y la trasladaron a una reserva de animales.

Becky Bartels/Farm Sanctuary

Allí había otras vacas con las que rápidamente formó vínculos.

En este lugar jamás volverá a sentir miedo de su vida, ni verá a ninguno de sus nuevos amigos sufrir, en este lugar podrá vivir feliz y con dignidad, como deberían poderlo hacer todos los animalitos del mundo.

Becky Bartels/Farm Sanctuary

Fuente: TheDodo.