Su familia lo había abandonado, pero esta chica es la muestra de cómo el amor y el compromiso salvan vidas.
La historia de este gatito es muy bonita e inspiradora porque él, siendo tan sólo un dulce animalito, ha tenido que enfrentar muchos cambios y retos recientemente en su vida, pero ha contado, afortunadamente, con valiosas personas muy comprometidas que lo han ayudado a hacerle frente a todas sus dificultades, han hecho lo que la familia se supone que debe hacer por un miembro tan querido como un peludito.
Bronson es un gatito que llegó a un refugio luego de que su dueño, un hombre mayor, falleciera. Sin nadie que se hiciera cargo de él, fue entregado a una fundación local. Cuando llegó pesaba más de 14 kilos! lo que es mucho para un animal de su tamaño.
Si bien estaba cuidado y se veía que había recibido amor por su estado general, tanto físico como emocional, era obeso y eso ponía en peligro su vida. Para los gatos la obesidad y el sobrepeso son completamente antinaturales, por eso los afecta muchísimo.
Como su dueño era una persona mayor, el gatito vivía una vida muy sedentaria y al parecer tenía acceso ilimitado a su comida, lo que hacía que producto del aburrimiento comiera en exceso y no quemara calorías.
En el refugio pensaron que debido a su peso no iba a ser adoptado por nadie, pero se equivocaron pues Mike Wilson y Megan Hanneman lo vieron, se enamoraron de él y se lo llevaron con ellos a casa. Desde el principio se comprometieron a ayudarlo a bajar de peso, pues sabían que estar en esa condición era un factor de riesgo para su salud.
Por supuesto, hacer bajar de peso a un gato no es nada fácil, pero ellos con mucho empeño lo lograron. Tuvieron en cuenta algo muy importante y es que el proceso de bajar de peso debe hacerse paulatinamente pues una bajada drástica conduciría al gatito a la muerte.
Limitaron su comida, cambiaron 3 veces de dieta para ir ajustándola a las nuevas necesidades de Bronson y sobre todo jugaron mucho con él, estimulándolo a moverse y quemar calorías.
Idearon juegos donde él tuviera que dar muchos saltos y casi todos obligaban al gatito a subir y bajar las escaleras, lo bueno es que la pareja hacía ejercicio tan bien al jugar con Bronson.
Aún le falta bajar varios kilos, pero hoy se ve mucho más saludable.
Si quieres ver cómo es la rutina de juegos de este gatito y sus dueños, visítalos en su cuenta de Instagram.
Fuente: IamBronsonCat.