No tenían planes de tener otro perrito rescatado pero Rogue no les dio muchas opciones.
Bethany y Tyson en Boston, formaron un hogar hace muchos años adoptando tres hijos peludos, dos gaticos y un perrito, una familia completa y muy feliz, los gatitos eran los hijos mayores, el perrito llegó un tiempo después, más exactamente en el año 2016, el era el menor, tenía a penas 10 meses, por lo que era el más consentido, lo que lo hacía feliz, disfrutaba de que sus hermanos mayores cuidaran de él y lo protegieran mientras él descansaba.
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El nombre del perrito es Rogue y aunque él se portaba muy bien, como todo cachorro, también disfrutaba de molestar a sus hermanos mayores.
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La familia aunque era amante de los animales, consideraban que no tenían capacidad para adoptar más animalitos por más de que quisieran, sin embargo, la vida les tenía reservado otra hijita peluda que les traería más amor y alegría al hogar.
Rogue encontró a su alma gemela.
Tanto físicamente como espiritualmente Rogue encontró su alma gemela un día que se encontraba paseando con sus papás humanos, estaban caminando por un parque en el que había una jornada de adopción organizada por un refugio local, Last Hope K9 Rescue, en la jornada de adopción habían muchos animalitos ansiosos esperando por un hogar.
Rogue, le llamó mucho la atención todos esos animalitos reunidos, pero le llamó la atención una perrita en particular, pues esta era igualita a él, así que se acercó a ella, la olfateo y lo supo enseguida, debía adoptar a aquella perrita.
Bueno, más bien debía convencer a su mamá y a su papá a llevarse a la perrita con ellos, pues realmente se había enamorado. Él se volteo y con miradita tierna y ojitos de súplica, le dijo a sus papás con su mirada que adoptaran a la perrita.
Y para su fortuna, sus papás no pudieron negarse, su hijito y aquella perrita eran igualitos y eso los llenaba de ternura, por lo que le pidieron al refugio que les hiciera el proceso de adopción pertinente para poder llevarse a casa a la chiquitina de nombre Beast.
La adopción fue aprobada y en menos de una día, ya eran inseparables.
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Lo más increíble de todo es que la familia estaba a punto de trastearse a Hawai, pero la vida no se los permitió hasta que se llevarán a su último integrante de la familia.
Los dos perritos se han vuelto muy unidos y pareciera que tuvieran un vínculo de toda la vida, parece que sus almitas han compaginado mucho, incluso se pasean el uno con el otro, con intenciones de juego y de consentirse el uno con el otro.
Mira en el siguiente vídeo como se divierten.
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Ya han pasado más de tres años desde que la familia está completa, expresan que todos están muy felices y que son muy unidos, Bethany y Tyson aseguran que adoran a sus cachorros y que aunque no se imaginaron tener tantos peluditos, están felices de haberles dado la oportunidad a todos y cada uno de ellos.
Nosotros siempre apreciaremos cada día por el amor incondicional que nos brindan y no podemos esperar a la próxima aventura. En broma cuando digo que estamos empezando nuestra propia arca de Noé. Dos humanos, dos gatos y dos perros. – Comentá Bethany.
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Aunque sin duda, los más felices de la familia son Rogue y Beast, son amiguitos y hermanos, desde que llegaron a la vida del otro son mucho más felices y juguetones, no pasan ni un minuto separados y se apoyan en los momentos difíciles.
De ellos dos sólo irradia amor, ternura y felicidad.
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Fuente: B3thany, InspireMore.